Desarrollo de la investigación postdoctoral

Ana MªPalmar Santos

Los títulos de doctor en Enfermería son relativamente recientes, si se tienen como referencia otras disciplinas que cuentan con un largo camino. En nuestro caso el primer reconocimiento para obtener el doctorado en la disciplina enfermera parte del Real Decreto de 2005 en el que se establece que:

“…respecto del doctorado, para el acceso a los estudios oficiales de Posgrado será necesario estar en posesión del título de Grado u otro expresamente declarado equivalente. Excepcionalmente, y previa solicitud individual y razonada del interesado, las universidades, mediante resolución rectora, previo informe vinculante del Consejo de Dirección, podrán admitir a aquellos estudiantes que, sin estar en posesión del correspondiente título, acrediten haber superado al menos 180 créditos correspondientes a las enseñanzas de primer ciclo, siempre y cuando entre estos esté comprendida la totalidad de los contenidos formativos comunes de un título de Grado.

(…)3. Los estudiantes podrán acceder a cualquier programa oficial de Posgrado relacionado o no científicamente con su currículo universitario, y en cualquier universidad, previa admisión efectuada por el órgano responsable del indicado programa, conforme a los requisitos de admisión específicos y criterios de valoración de méritos que, en su caso, establezca la universidad” (1).

Los profesionales de enfermería, hasta este momento, estábamos abocados a cursar otras titulaciones superiores que nos permitieran acceder a una formación de posgrado, que a su vez nos habilitase para la realización de la tesis doctoral. Este hecho tuvo como consecuencia que las/los enfermeros/as que se iban doctorando lo hicieran en otras disciplinas y áreas de conocimiento, como eran antropología, sociología, periodismo psicología, entre otros. Además, en general, estos/as enfermeros/as estaban vinculados al mundo de la docencia y no era habitual encontrar profesionales de la asistencia con motivación por su crecimiento curricular mediante el desarrollo de un trabajo de tesis doctoral.

En un primer momento, los lugares donde comienzan a desarrollarse los posgrados en enfermería que capacitaban para la realización de la tesis doctoral, estaban liderados en su mayor parte por profesionales con cargos directivos, en base a esto, se desarrollaron propuestas con este mismo perfil, es decir, la oferta estaba principalmente orientada hacia la gestión, la calidad o la dirección.

El acceso universal a la formación de posgrado fue el detonante para que muchas enfermeras y enfermeros del ámbito clínico planteasen proyectos de investigación más ligados al ámbito de la enfermería avanzada y claramente orientados a la elaboración de una tesis doctoral, lo que iba haciendo posible además, la constitución de una línea propia de investigación tras la obtención del título.

El siguiente Real Decreto del 2011 abre la vía de acceso a la tesis doctoral para las especialidades en Enfermería (2). Todo esto permite: en primer lugar acabar con el “techo de cristal” que limitaba las perspectivas de los titulados en enfermería, en segundo lugar disfrutar de un nuevo camino profesional con todos los itinerarios académicos posibles, y por último, contar con una trayectoria de aprendizaje investigador en un contexto de calidad que permitirá la incorporación de la cultura investigadora como parte de nuestra identidad, normalizando su desarrollo.

Esta nueva situación ha permitido que actualmente muchas enfermeras tengan el grado de doctor y que muchas otras estén realizando trabajos de investigación que sin duda generarán nuevo conocimiento dentro de la disciplina Enfermera.

En la actualidad, cada vez más convocatorias de becas de investigación establecen como requisito para optar a la figura de investigador principal estar en posesión del grado de doctor. Este fue el caso por ejemplo de la última convocatoria del Ministerio de Economía y Competitividad en el procedimiento de concesión de ayudas de investigación, desarrollo e innovación, correspondientes al subprograma de proyectos de investigación fundamental. Aunque en dicha convocatoria también reconoce la posibilidad de que podrán ser investigadores principales los titulados superiores, aunque no posean el título de doctor, siempre y cuando acrediten su experiencia en actividades de I+D+i durante al menos diez años o, alternativamente, que hayan dirigido proyectos de investigación de entidad equivalente a los del Plan Nacional de I+D+i durante al menos cinco años (3). Este hecho llevará a que las enfermeras que opten por seguir una línea de desarrollo dentro del trabajo investigador, por lo general tendrán que plantearse la realización de la tesis doctoral.

La mayor parte de la investigación enfermera es investigación traslacional, es decir, que pretende más cambiar la práctica que comprender las causas de los problemas, se basa en la efectividad de los procedimientos, se interesa por los factores relativos al paciente pero también al sistema de salud, procura encontrar resultados que puedan ser generalizables en condiciones similares, se centra más en lo común que en lo raro, aspira a procurar unos beneficios absolutos más que relativos, plantea aspectos de calidad relativa y dinámica y pretende alcanzar una salud optima para muchos, antes que para unos pocos. En este contexto las áreas que presentan los profesionales de enfermería a las convocatorias para financiación publica están ligados a temas como: Enfermos Crónicos, Continuidad de cuidados/atención domiciliaria, Cuidadores principales, Educación para la salud, seguridad del pacientes, Evaluación de la Práctica clínica, Técnicas y procedimientos, Valoración y cuidados enfermeros, Cuidados a poblaciones vulnerables, Práctica clínica basada en la evidencia, Calidad, gestión y organización de los cuidados.

Otra de las líneas de la investigación postdoctoral y que se suma a los beneficios de estar en posesión del título de doctor, es el acceso a convocatorias de becas postdoctorales que amplían de forma muy importante las posibilidades de desarrollo e intercambio, así como de acceso a financiación que permiten dedicarse en ocasiones, a tiempo completo a la labor investigadora. Entre la oferta hay algunas generales como pueden ser las que cada año convoca el Ministerio, ahora de Economía y Competitividad, para todos los doctores de cualquier disciplina que quieran desarrollar investigación en otros centros. Se trata por ejemplo de las becas Fulbright para doctores que quieran desarrollar trabajos de investigación en centros de excelencia en Estados Unidos. Para Europa encontramos las becas Salvador de Madariaga y José Castillejo, que se encuentran ligadas al historial investigador de solicitante (novel, sénior y experto), o las becas FPU de movilidad de profesorado, que permiten a los profesores universitarios de cualquier disciplina desarrollar líneas de investigación a partir de estancias fuera de su universidad de origen. Los subprogramas Torres Quevedo, Ramón y Cajal o Juan de la Cierva se concentran más en propuestas investigadoras posdoctorales de investigación básica, que no suelen ceñirse bien a nuestro campo de trabajo.

Existen además otras becas, sociedades y grupos de trabajo específicos para doctores en enfermería que se centran fundamentalmente en posibilitar, incentivar y dar visibilidad a la investigación que se desarrolla en el ámbito de esta disciplina. Uno de estos espacios es la Sociedad Internacional Sigma Theta Tau. International Honor Society of Nursing. Esta institución convoca becas posdoctorales con el objetivo de apoyar la Investigación en cuidados y la investigación en Enfermería clínica. En la misma línea, se encuentra la Academia de Ciencias de la Enfermería Europea (EANS). Para ser miembro de esta institución, es criterio imprescindible poseer el grado de doctor. Su pretensión es poner en común líneas de investigación, favorecer estrategias de trabajo colaborativo entre instituciones, países e investigadores, con el fin de mejorar y hacer factibles los proyectos. Así mismo, impulsan la investigación enfermera mediante la celebración de una escuela de verano para doctorandos en enfermería con el fin de compartir los proyectos de tesis y recibir asesoría de expertos investigadores de cada área en Europa.

A causa de la particular evolución de la titulación de enfermería en nuestro país, la investigación postdoctoral en enfermería es reciente y se está configurando y conformando en el marco de los nuevos tiempos de oportunidades formativas, así como de oferta de subvenciones y perfiles de investigación. Para hacer investigación en España es fundamental la existencia de líneas con temas y grupos estables de investigación y es necesario a su vez, el acceso a publicaciones de impacto por parte de los investigadores con sus trabajos. Una oportunidad para desarrollar estos grupos estables de investigadores en enfermería sería el VIII Programa Marco de la Unión Europea que ha recibido el nombre de Horizonte 2020. En él se propone financiar líneas de trabajo preferentes de investigación relacionadas con: el envejecimiento activo y saludable, la capacitación de los pacientes y la atención de la salud personalizada que mejore además, la sostenibilidad y la satisfacción de los usuarios (4). Para acceder a este programa los investigadores tienen que conformar grupos de trabajo transnacionales lo que implica mejorar la potencia investigadora de los grupos y sus componentes, así como la producción y visibilidad de la investigación en estas áreas.

El camino iniciado hace escasamente una década con los primeros doctorados en enfermería ofrece múltiples oportunidades de desarrollo que no debemos dejar escapar. Se trata de una vía excepcional para producir investigación de calidad que permitirá mejorar la práctica asistencial de los profesionales enfermeros y la calidad de vida de los ciudadanos.

BIBLIOGRAFÍA

1.-Boletín Oficial del Estado. Real Decreto 56/2005, de 21 de enero, por el que se regulan los estudios universitarios oficiales de Posgrado [consultado el 22 de marzo de 2013]. Disponible en: http://www.boe.es/buscar/doc.php?id=BOE-A-2005-1256??

2.- Boletín Oficial del Estado. Real Decreto 99/2011, de 28 de enero, por el que se regulan las enseñanzas oficiales de doctorado [consultado el 22 de Marzo de 2013]. Disponible en: http://www.boe.es/boe/dias/2011/02/10/pdfs/BOE-A-2011-2541.pdf

3.- Boletín Oficial del Estado. Procedimiento de concesión de ayudas para la realización de proyectos de investigación y acciones complementarias dentro del Programa Nacional de Proyectos de Investigación Fundamental, en el marco del VI Plan Nacional de Investigación Científica, Desarrollo e Innovación Tecnológica 2008-2011. BOE núm. 309 de 21/12/2010 [consultado el 23 de marzo de 2013]. Disponible en: http://www.crue.org/export/sites/Crue/legislacion/documentos/BOE/boe_21_DIC.pdf

4.- Comisión Europea: Departamento Programa Marco I+D Unión Europea. (2012). Horizonte 2020 (H2020): el programa de investigación e innovación europeo a partir de 2014 [consultado el 27 de febrero de 2013]. Disponible en: http://www.h2020.es/2012/11/recomendaciones-para-la-implementacion.html