Innovación y nuevos retos en la investigación en Enfermería

Caro (citado por Zambrano) afirma que “el objetivo de la investigación en enfermería es comprender, interpretar y explicar los fenómenos que existen y que influyen en las interacciones del cuidado, para apoyar intervenciones favorables a la vida misma”. Por tanto, si la investigación enfermera debe ir dirigida hacia mejorar la calidad y la atención a las personas que atendemos, lo primero que debemos hacer es centrar nuestros esfuerzos en investigar sobre los que serán los principales retos de salud del siglo XXI, es decir, sobre cronicidad y dependencia. De hecho, el pilar de retos sociales del Horizonte 2020, es el que tiene mayor partida económica (solo este pilar supone casi el 40% de la partida total), y en él se plantean programas sobre salud, cambio demográfico y bienestar, donde se incluyen aspectos temas como mejorar la promoción de la salud, mejorar el diagnóstico, envejecimiento activo y saludable, o el tratamiento y tecnologías innovadoras; donde los enfermeros tenemos por tanto un amplio campo para la investigación.

Pero en un mundo tan globalizado como el actual, es preciso conocer la diversidad cultural del cuidado, teniendo en cuenta que todas las personas merecen ser cuidadas de acuerdo a sus creencias y valores. Como Madeleine Leininger (considerada la fundadora de la enfermería transcultural) defendía, las enfermeras debemos ser sensibles a las diferencias culturales. Esta autora enfatiza estas diferencias, haciendo hincapié en la necesidad de que las enfermeras conozcan las diversidades del cuidado para poder ofrecer a las personas que atienden un cuidado congruente con su cultura y acorde a sus necesidades, puesto que, como ella afirma, quienes reciben cuidados que no concuerdan con sus creencias, valores y estilos de vida, tendrán conflictos culturales, éticos o morales que les harán mostrar síntomas de insatisfacción y tensión, amén del hecho de que la enfermedad es también una construcción social.

Por tanto, pese a que algunas de las temáticas y programas planteados por el Horizonte 2020 inviten a realizar estudios metodológicos para poder medir el impacto social de las actividades realizadas en términos de efectividad, más aún cuando el criterio del impacto social ha ganado fuerza con respecto a su antecesor, el 7PM; no podría posicionarme en un tipo de investigación, en una metodología más o menos idónea. Será necesario saber cuáles son los problemas de salud a los que debemos hacer frente (para lo que necesitaremos estudios descriptivos), cuál es la forma más efectiva de hacerlos frente (mediante estudios experimentales u observacionales) o cómo espera la población que los hagamos frente (mediante estudios cualitativos). Pero además, si aplicamos el término de salud en toda su extensión, será también necesario indagar sobre necesidades sentidas de la población, por lo que la investigación cualitativa se presenta como imprescindible desde el principio de las fases antes expuestas, por tanto, parece que los principales paradigmas en ciencias de la salud serán imprescindibles en los retos futuros de la investigación enfermera.

Pero no solo debemos centrar nuestros esfuerzos en investigar sobre los retos de salud de este siglo XXI, sino también es preciso que lo hagamos a través de redes de investigación, algo que en sí mismo supone un reto, pues parece complejo que puedan establecerse redes amplias de investigación dentro de nuestra disciplina.

BIBLIOGRAFÍA

Gloria Esperanza Zambrano Plata. Hacia la consolidación de enfermería en el siglo XXI. Revista Ciencia y Cuidado. 2011;8(1):84-95.

Muñoz de Rodríguez L, Lucía Vásquez ML. Mirando el cuidado cultural desde la óptica de Leininger. Colombia médica. 2007; 38(4)supl 2:98-104.

European Comission. Horizon 2020. The EU Framework Programme for Research and Innovation 2014-2020. [Citado 23 feb 2015].

http://ec.europa.eu/research/horizon2020/pdf/press/horizon2020-presentation.pdf

4ª Jornada Técnica de Investigación en Cuidados. Experiencias de investigación colaborativa en Salud; 2013 May 17. Madrid: Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad; 2013.

Ana Belén Salamanca Castro